Almacenamiento extra en la ducha con un carrito de baño reutilizado

¿Se les ha ocurrido alguna vez a los constructores que la gente no se ducha sólo con jabón en una cuerda? En nuestro apartamento de vacaciones, el único lugar en el que las adolescentes pueden poner todas sus botellas es en el alféizar de la ventana, en el primer piso, justo encima de la puerta principal. Es un juego de dominó a la espera de ser derribado.

El otro problema con el almacenamiento en la ducha es que cualquier cosa que uses tiene que resistir el agua. Por eso, la mayoría de los contenedores son de plástico. Así que aquí tienes otra solución, siempre y cuando tengas un viejo carrito de baño de madera y tus azulejos aspiren a las ventosas.

Yo compré un carrito de baño bastante viejo en una tienda de beneficencia. Después de un lavado inicial con un cepillo, usamos una sierra para acortar los brazos a unos 4 cm cada uno.

A continuación, con una broca para madera de 8 mm, hicimos un agujero en cada brazo. El tamaño de los agujeros depende del grosor de la cuerda que vayas a utilizar.

Lo lijé todo para eliminar la suciedad y el barniz, y luego lo limpié con un paño húmedo.

Lo colgué y le di una capa de imprimación blanca Rustolem.

A continuación, una o dos capas de pintura al óleo (que espero que esté bien si se moja).

Ah, sí, mi alcachofa de la ducha está inclinada hacia abajo, así que la noche anterior añadí una gran mancha de sellador de silicona en la parte superior de la tubería, a una ligera distancia de la pared. Esto actúa como un tapón para evitar que el caddy se deslice hacia abajo.

Volviendo al carrito: Pasé un trozo de cuerda de nailon por cada juego de agujeros.

Y até ambas cuerdas en el centro. Utilicé un poco de pegamento caliente dentro del nudo como medida adicional y recorté los sobrantes.

Una vez utilizado, mi diseño tiene un gran defecto: al tocarlo se produce un efecto de balancín, lo que no es de recibo cuando se busca desesperadamente el paño con jabón en los ojos. Así que añadí unas ventosas en la parte trasera con una pistola de pegamento. También se puede utilizar silicona. Por supuesto, esto sólo funcionará si los azulejos son lo suficientemente lisos como para que las ventosas se adhieran.

Pero una vez solucionado el problema, ya tenemos una estantería extra.