Convierte tus viejas raquetas en decoración rústica de otoño

Tenía unas cuantas raquetas viejas almacenadas que recogí en el centro de reutilización de basuras hace unos años y nunca las he utilizado. Decidí que ya era hora de despejarlas... así que las convertí en las perfectas calabazas de otoño.

Para empezar, corté los mangos de las raquetas para que tuvieran forma de calabaza. Debo señalar que fue mucho más fácil cortar el mango de las de tenis que el de las de bádminton. Si cortas las raquetas de bádminton, ten en cuenta que el mango de metal va directo a la parte de la raqueta. Me costó varios intentos pero finalmente pude encontrar el extremo muy cerca del óvalo.

Con los mangos cortados, fue rápido y fácil pintar las raquetas. Dos capas de pintura naranja por toda la madera y las cuerdas y eso fue todo para la pintura.

Para dar a las calabazas un toque más desgastado y rústico, se lijaron y se dieron toques de cera oscura.

Pensé que sería divertido añadir algo de color y textura a una de las calabazas.

Tenía un poco de hilo grueso que me sobró de este proyectoasí que lo tejí con una aguja de bordar.

Un poco de pegamento caliente en la parte posterior de la raqueta mantuvo cada longitud en su lugar en cada extremo. Esto lo hice con la raqueta de tenis, ya que sólo pensaba hacer una.

Para rematar las calabazas, recogí algunas hojas secas en un paseo y un trozo de corteza de árbol.

La corteza de árbol se cortó fácilmente por la mitad y se convirtió en los tallos de las calabazas. Las hojas secas se añadieron mientras pegaba los tallos.

Estoy realmente enamorada de estas calabazas rústicas y me encanta que sean prácticamente gratis. No se puede superar la gratuidad 🙂 .

Si quieres conocer más proyectos de upcycling ahorrativos, echa un vistazo a mi nuevo libro Recreated Designs - Proyectos de casas de campo con un toque vintage.

Para ver el post original de Recreated Designs, visita el siguiente enlace del blog.