Cómo hacer una funda de almohada DIY con Sharpie y alcohol

Planifica tu diseño. Yo voy a empezar con uno sencillo de puntos. Simplemente haz puntos por toda la funda de almohada. Los puntos pueden ser de cualquier tamaño, pero cuanto más grandes sean, más se extenderá el color. A continuación te mostraré una opción de puntos más grandes.

Una vez que la funda de almohada esté cubierta de puntos, simplemente vierte el alcohol sobre los puntos. El color comienza a extenderse inmediatamente y se extiende más con el tiempo. CONSEJO: Querrás poner un poco de papel de aluminio u otro elemento para proteger tus encimeras del marcador permanente.

Una vez que la funda de almohada se seca (normalmente en unas 2 horas), ya está lista, pero para esta decidí añadir más puntos de diferentes colores para ver qué pasaba. Añadí puntos en un color turquesa y otro azul oscuro en la parte inferior de la funda de almohada, y luego vertí más alcohol sobre ellos exactamente como hice anteriormente.

Dejé secar y una vez que estuve contenta con el diseño, planché la funda de almohada. El calor de la plancha fija el color y te da la posibilidad de lavarlas en el futuro con menos sangrado.

Este es el resultado. Como puedes ver, la tinta de los puntos se extiende realmente con el tiempo.

Y aquí está el resultado del que hice con puntos más grandes.

Este se extendió tanto que toma la apariencia de flores. ¡Muy divertido!

Ahora es el momento de uno de mis favoritos... con un aspecto más orgánico de batik.

Coge una regla y dibuja 4 o 5 líneas verticales, no tienen que estar perfectamente espaciadas. A continuación, dibuja 4 o 5 líneas horizontales. Yo dejé intencionadamente que mi rotulador se asentara sobre la tela en algunas zonas para mezclar el grosor de las líneas y hacerlas más orgánicas y menos perfectas.

Ahora hay que dibujar líneas en ángulo en cada cuadrado. Empecé dibujando una línea en una dirección, y luego alterné las direcciones hasta llenar cada cuadrado. De nuevo, no deben ser líneas perfectas (a menos que quieras ese aspecto).

En este caso, utilicé una botella de spray llena de alcohol para conseguir un aspecto diferente. El alcohol hace que la tinta se extienda mucho más y aclara el color, y el spray es un poco menos dramático.

Pulveriza sobre todas las líneas y ponlas a secar.

La tinta se extiende muy bien al secarse.

Dejé que se secara y, una vez que estuve contenta con el diseño, planché la funda de almohada. El calor de la plancha fija el color y te da la posibilidad de lavarlas en el futuro con menos pérdidas.

Y así es como quedó. Me encanta, y quiero hacer más en diferentes colores.

Aquí hay otro que hice usando líneas horizontales simples y el método de duping con alcohol. Muy sutil.

¿Qué os parecen estas fundas de almohada hechas con Sharpie y alcohol? Son muy fáciles, ¿verdad?

Yo no quiero dejar de hacerlas. Tengo que pedir más fundas de almohada :)