Transformar un espejo de IKEA con papel pintado
El espejo principal de nuestra casa está en el pasillo, al final de la escalera del desván. Es un espejo muy funcional pero no especialmente atractivo. El espejo de IKEA no tiene nada de malo, tiene bonitas esquinas curvas y un marco ancho. Sin embargo, el color blanco del marco quedaba un poco mal con mis paredes de color blanco. Quería convertirlo en un objeto más atractivo en la pared que en un simple espejo funcional. Fue entonces cuando decidí ser creativa con el papel pintado.
Se trataba de un espejo grande, así que lo saqué de la pared y lo puse fuera para empapelar, ya que tenía más espacio en el jardín.
Elegí un bonito papel pintado con estampado tropical para el marco del espejo. Los detalles completos sobre el papel pintado están en la entrada del blog al final.
Escogí un papel pintado con un estampado intenso, ya que es más fácil ocultar las juntas al pasar por las curvas. Un papel pintado geométrico habría sido más difícil de combinar.
Medí tanto el borde largo del espejo como los bordes cortos. Corté cuatro tiras de papel pintado, una para cada borde del marco del espejo. Me aseguré de que el papel pintado fuera lo suficientemente ancho como para que hubiera un pequeño solapamiento en el borde del marco del espejo.
Preparé un poco de pasta de papel pintado siguiendo las instrucciones del fabricante. Puse un poco de pasta en el marco del espejo y dejé que se secara. Esto fue para ayudar a proporcionar una clave para el papel pintado pegado. Luego apliqué la pasta a la parte trasera de la tira de papel pintado y la pegué al marco.
Primero pegué las 2 tiras largas de papel a los lados del marco. Lo bueno de usar papel pintado sobre otros papeles es que es fuerte y fácil de mover en su sitio cuando está mojado.
Alise las burbujas al colocar el papel en el marco con un cepillo para papel pintado.
He medido las tiras de papel pintado lo suficientemente anchas como para que envolvieran el marco hasta la parte trasera.
Al pasar por las esquinas, corté hendiduras en el papel pintado para que se doblara fácilmente alrededor de las curvas.
A continuación, empapelé las tiras superiores e inferiores de papel pintado, intentando que coincidieran con el patrón lo mejor posible.
Una vez seco el papel pintado, colgué el espejo en el pasillo de arriba. El marco destaca ahora y alegra un rincón bastante aburrido de la casa.
El papel pintado es estupendo para transformar objetos aburridos en algo más interesante. Incluso he empapelado el cubo de la basura de mi cocina para hacerlo más interesante (véalo aquí).
Este proyecto fue traducido del inglés
