Cómo crear un mosaico único con vajilla vintage
Me gusta reciclar la vajilla rota y evitar que acabe en el vertedero. Los mosaicos son una forma divertida y consciente de relajarse y crear, así que combinar estas dos cosas
es todo un acierto.
Primero compro un tablero de soporte con un agujero pretaladrado para colgarlo y utilizo cola blanca para crear un borde que se va pegando uno a uno.
Me gustan los pequeños puntos de cerámica, ya que añaden textura a la obra de arte también.
El diamante de cristal lo corté en triángulos con un alicate de azulejos, pero se puede comprar precortado. Los pegué dejando pequeños huecos para la lechada.
A continuación, corté un poco de vajilla de época en piezas que encajaran y quedaran bien en el centro del diseño.
Utiliza protección ocular para evitar lastimarte con las virutas. Pega en el centro tres piezas complementarias.
Relleno el fondo con más azulejos cortados y dejo secar toda la noche.
Mezclo polvo de lechada gris oscuro con un poco de agua y lo mezclo hasta formar una pasta. Lo aplico por todo el mosaico en todas las grietas y elimino el exceso.
Le doy un último repaso y ¡ya está listo para colgar en la pared!
Este proyecto fue traducido del inglés