Cómo lidiar con los cardos en su propiedad y en su jardín

Si tienes un jardín grande, o si vives en una zona rural, los cardos pueden ser un problema bastante común. Estas son mis formas favoritas, más efectivas y prácticas, de lidiar con los cardos en tu jardín y en tu propiedad.
Vivimos en una propiedad de 1,5 acres que está básicamente abierta a los elementos en todos los lados, excepto por una línea de árboles a lo largo de un lado de la casa que actúa como una barrera contra el viento. Tenemos un arroyo que corre a lo largo de un lado de la propiedad que está lleno de todo tipo de plantas nativas y flores silvestres, pero aparte de eso estamos rodeados de campos de los agricultores en todos los lados. Es el peor de los casos en lo que respecta a las malas hierbas, ya que todas las plantas naturales (también conocidas como malas hierbas) van a sembrar a las orillas del arroyo, y todo el viento que viene de los campos las arrastra hasta nuestro huerto y nuestros jardines de flores. Por supuesto, una de las malas hierbas más fuertes y abundantes es el cardo, así que nos hemos convertido en expertos en cómo tratar con los cardos por pura necesidad.
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Aunque pruebes todo tipo de productos químicos fuertes para matarlos (no lo hagas), volverán a aparecer, y tendrás que acabar usando aún más productos químicos fuertes para mantenerlos a raya. El resultado final: Acabarás muy enfermo y seguirás teniendo cardos. ¡Esas cosas son fuertes! La verdadera solución es dejar el glifosato y aprender a vivir con los cardos. Se puede hacer.
Si tienes una zona de tu propiedad por la que no necesitas caminar activamente, te sugiero que respires hondo y los dejes crecer y hacer lo suyo.
Si tienes grandes secciones abiertas de tu propiedad que tienden a ser tomadas por los cardos, hay una solución bastante fácil y efectiva que puedes emplear para hacer que esa área sea utilizable y libre de cardos: Siembra un césped y córtalo. Mira
Si tienes mucha tierra abierta en tu jardín y el viento hace que entren semillas de cardo, es probable que acabes teniendo cardos en tu jardín. ¡Casi siempre los tenemos! La buena noticia es que son superfáciles de arrancar, siempre y cuando los cojas antes de que midan unos 30 centímetros.
Para arrancar un cardo y toda su raíz del suelo, sal a tu jardín después de que haya llovido, o justo después de haber regado todo. Este es el mejor momento porque el suelo estará blando y las raíces se soltarán más fácilmente.
[Para obtener más consejos sobre los cardos, visita la entrada completa del blog].
Este proyecto fue traducido del inglés