Una corona que pasa de la monotonía a la brillantez del blanco.

Hace unas semanas encontré una corona de flores de dos dólares en una tienda de segunda mano. Sabía que tenía potencial para convertirse en mi visión de la belleza.
Empezó siendo muy simple y monótona, pero tenía una gran estructura. Le di una capa de pintura blanca en aerosol, y añadí algunas sales de epsom para darle un poco de brillo a la pintura húmeda.
Los toques finales en oro con un toque de mi rojo favorito lo hicieron realmente muy especial.
Está colgado sobre nuestra chimenea dentro de dos marcos dorados vintage... es simplemente la perfección. Espero que visites mi blog y veas el look completo.

Este proyecto fue traducido del inglés