Dos sencillas manualidades de invierno con naranjas secas

Me encanta el olor de los cítricos, especialmente durante las fiestas. Así que los últimos años he intentado incorporar naranjas secas a mi decoración navideña. Secar la fruta es muy fácil (comparto cómo lo hago en mi entrada del blog) y si lo haces bien, la fruta durará muchos años.

Pero este año, en lugar de guardarlas en el almacén, decidí crear algo que pudiera mantener durante todo el año. Empecé con la corona de naranjas secas y eucaliptos de inspiración escandinava.

Para esta sencilla pieza de decoración, reuní unos cuantos tallos de eucalipto seco que ya tenía, más tres naranjas secas, una forma de corona dorada, alambre floral y mi pistola de pegamento.

Para empezar, simplemente corté los tallos a la medida. Quería una corona asimétrica, así que sólo envolví el eucalipto alrededor de una parte de la forma dorada de la corona. A continuación, fijé los tallos con el alambre floral.

A continuación, fijé las tres naranjas secas a la corona con la pistola de pegamento. Por último, rellené los espacios vacíos con hojas de eucalipto que saqué de los tallos sobrantes.

Me encanta el aspecto natural de la corona y el naranja y el verde son la combinación de colores perfecta.

De nuevo, inspirándome en el ambiente escandinavo, decidí colgar la corona, junto con otras dos coronas invernales, en un lado de la puerta de nuestro patio. (La corona añade un poco de sol, incluso en los días más nublados.

La siguiente pieza decorativa que creé fue una bonita guirnalda de cuentas naturales y naranjas secas. Pedí estas cuentas en Amazon hace varios meses pero aún no había llegado a usarlas.

Como este juego de cuentas tenía diferentes tamaños, lo primero que hice fue elegir qué tamaños quería utilizar. Luego decidí cuántas de cada una quería añadir y en qué orden. Una vez que lo tuve claro y que todas las cuentas estaban listas, me dispuse a ensartarlas. A continuación, tuve que preparar las naranjas para ensartarlas en el yute. Para ello, utilicé un cuchillo afilado y perforé un agujero en la parte superior de cada naranja seca. Ahora era el momento de empezar a ensartar las cuentas y las naranjas. Para ello, añadí un trozo de cinta adhesiva a un extremo del hilo (o del yute) y empecé a ensartar las cuentas. Cuando tuve el número de cuentas que quería en la primera sección, añadí una naranja. Luego, más cuentas y más naranjas.

Una vez que tenía todas las cuentas y las naranjas ensartadas en el yute, até cada extremo y añadí una borla. (Ver mi post sobre cómo creé las borlas).

Las naranjas son el complemento perfecto para el tono natural de las cuentas de madera, pero ciertamente podrías pintar tus cuentas del color que quisieras. Lo mejor es que cuando te canses de las naranjas, sólo tienes que cortar la parte superior donde está el agujero y deslizar la naranja fuera del cordón. De este modo, sólo te quedará una bonita guirnalda de cuentas naturales para el resto del año.