Porche de otoño Parte 2
La primera parte fueron las macetas de calabazas para los lados de mi escalón delantero, así que ahora es el momento de terminar este proyecto otoñal.
Todo comenzó al ver estas cabezas de espantapájaros en Dollar General. Sabía que quería hacer algo con ellas, pero tardó en llegarme.
Había estado guardando los viejos vaqueros de mi hijo con las cremalleras rotas para la tela (que me doy cuenta de que nunca iba a utilizar de todos modos), así que se me ocurrió hacer cuerpos para los espantapájaros. No quería pegarlos sin más. Cuando un día me puse a ello, se me ocurrió... ¡el juego de bistro del porche de mi casa!
Viejo y descolorido, necesitaba una nueva vida, así que le quité los cojines, lo enjuagué y me puse a trabajar. La parte más fácil fue la mesa. La cubrí con un mantel de plástico y envolví la parte trasera como si fuera un regalo, utilizando cinta de embalar para asegurarla.
Por supuesto, necesitaba un centro de mesa, así que se me ocurrió una solución sencilla. Envolví el original en arpillera y sustituí la planta por rafia y lo rematé con una calabaza rústica.
Lo siguiente fue complicado... ¡ponerle pantalones a la silla! Cada silla será diferente, pero pude hacer cortes a los lados y en la parte trasera para que llegaran hasta donde estaría la cintura natural de una persona sentada. La primera me costó un poco, pero para la siguiente ya sabía lo que hacía.
Originalmente iba a dejar el cuerpo plano. Una vez que lo tuve vestido decidí que necesitaba relleno. Tenía un poco de espuma de cojín que necesitaba propósito e hizo grandes piernas y el torso. Terminé de vestirlo asegurando la camisa alrededor del respaldo de la silla.
Ahora a darle una cabeza pegando tacos en la parte delantera y trasera bajo el pañuelo. Luego hice el cuello con un pequeño trozo de espuma colocado con una espiga.
Luego pegué los tacos por debajo de la camiseta y utilicé imperdibles para mantenerlo en su sitio. Ahora es el momento de los acabados!
Utilizando rafia, creé el efecto de sobrecarga que suele tener un espantapájaros. Le di los pies y las manos usando bridas para ceñir la ropa y até un trozo alrededor para el decorado.
Luego rellené con más rafia la zona del cuello.
Ahora necesitaba a su mujer, así que repetí los pasos añadiendo una de mis viejas bufandas en lugar de una sobrecamisa. Menos mal que tenía toda esta ropa vieja, pero sí que consideré las tiendas de reventa. Me gusta que haya podido mantener el coste bajo y utilizar artículos que de otra manera se habrían tirado!!!
Lo he colocado todo en su sitio y he añadido una bonita corona de flores fácil de hacer y una decoración para la puerta para que todo quede bien. Ahora estoy lista para el otoño
Este proyecto fue traducido del inglés
Preguntas frecuentes
¿Tienes una pregunta sobre este proyecto?
Alguna idea de jardinera de otoño
Sería más divertido disfrazarse de espantapájaros en el porche y asustar a los niños.
Esta es una idea fabulosa, gracias por la inspiración y tenerlos en las sillas significa que son menos propensos a ser robados!
No puedo esperar para empezar...
gtrat trabajo, el amor, el amor, el amor!!!