Tablero de corcho en espiga

Cuando Beth me preguntó si podía hacer un tablero de corcho para el espacio de su escritorio, supuse que podría comprar una hoja gigante de corcho y cortarla a medida. Ja! Jaja! Gente, si sabéis de algún sitio que suministre planchas gigantes de corcho en Perth, por favor hacédmelo saber.

Después de una extensa investigación (5 minutos en Google) llegué a la conclusión de que el único corcho disponible sería estas baldosas de corcho de Bunnings.

Lo bueno de vivir en esta era de la tecnología es que puedes previsualizar cualquier idea que tengas. Te garantizo que alguien, en algún lugar, ya ha pensado en tu idea y la ha publicado en Pinterest. Así que busqué tablero de corcho de baldosas de suelo para ver si me gustaba el aspecto de las baldosas cuadradas apiladas. Y no. Por suerte, también encontré esta imagen:

¡Corcho en espiga! Me encanta.

Me apresuré a ir a Bunnings y compré una hoja de MDF y un par de paquetes de baldosas de corcho:

Utilicé mi ingletadora para cortar las baldosas por la mitad (puedes cortar varias baldosas a la vez, son bastante blandas). Luego las coloqué en forma de espiga para ver cómo quedaban.

Sí, sí, sí! Esto va a ser fabuloso! Pegué las baldosas de una en una por secciones y luego apilé algunas maderas pesadas encima hasta que se secó el pegamento (estaba trabajando al aire libre a pleno sol y si no ponía peso a las baldosas de corcho, empezaban a curvarse en los bordes mientras se secaba el pegamento).

Una vez que la mayor parte de la tabla estaba pegada y seca, volví a rellenar las piezas de los bordes.

Consejo: no cortes las piezas de los bordes para que encajen. Simplemente pega las piezas más grandes y corta el sobrante una vez que esté terminado. La foto de arriba muestra cómo sujeté la madera a los bordes mientras se secaba el pegamento. A continuación, utilicé la sierra de calar para cortar los bordes de la plancha de MDF, eliminando las baldosas de corcho que sobresalían.

Había supuesto que tendría que atornillar el tablero de corcho a la pared del escritorio para fijarlo con seguridad. Por suerte, el tablero encajaba tan bien que, una vez que lo empujé en su sitio, no se iba a ir a ninguna parte.

¿Lo soportas? El diseño en espiga le da un aspecto tan elegante y tradicional.

Una vez que el tablero de corcho esté lleno, probablemente no será obvio que hay un patrón de espiga allí... ¡pero yo lo sabré!

El nuevo tablero de corcho en espiga de Beth está en un rincón del escritorio que se encuentra a un lado de su impresionante cocina. Me encanta. LO ADORO.

¿Cuánto quieres que este sea tu espacio de escritorio ahora? Se ve tan suntuoso.

Espero que os haya gustado mi pequeño tutorial y que os haya servido de inspiración para el espacio de escritorio. Como siempre, si hacéis uno vosotros mismos, ¡enviadme fotos!