Cómo cultivar y cosechar sandías jugosas y deliciosas
Por Alexa Erickson
La sandía, jugosa, hidratante y vibrante, es una fruta deliciosamente sana que destila la esencia del verano. Esta planta en forma de enredadera es una de las frutas más populares para cultivar en el jardín y, aunque requiere mucho espacio, sol y agua, es posible cultivarla en tu propio patio. Esta guía te ayudará a plantar, cultivar y disfrutar de la sandía en tu jardín.
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Cuándo plantar sandías
Las sand ías requieren un suelo cálido, por lo que hay que plantarlas desde finales de la primavera hasta principios del verano. En climas cálidos con temporadas de crecimiento largas (comprueba tu zona de rusticidad aquí), puedes sembrar las semillas de sandía directamente en el exterior unas dos semanas después de la fecha de la última helada, o cuando la temperatura del suelo sea de 70 grados Fahrenheit o superior (puedes calcularlo con un termómetro de suelo).
En los climas fríos con temporadas de crecimiento cortas, inicie las semillas en el interior dos o tres semanas antes de la última fecha de helada, y trasplante las plántulas dos semanas después de esa fecha, o cuando se haya alcanzado la temperatura recomendada del suelo de 70 grados. Este es también el momento en que puedes trasplantar las plantas de vivero.
Consejo profesional: Colocar plástico negro sobre la zona de plantación puede ayudar a calentar la tierra más rápidamente. Asegúrate de hacer algunos agujeros en el plástico para dejar pasar la humedad.
Dónde plantar la sandía
La plantación de sandías requiere un suelo ideal, mucho sol y agua, y mucho espacio. Estos son algunos factores que debes tener en cuenta antes de decidir dónde plantar sandías.
Clima
Dado que las sandías necesitan un largo período de tiempo cálido para crecer bien, tienden a ser más populares en climas más cálidos con largas temporadas de crecimiento. Sin embargo, no te preocupes si vives en un clima más frío: también puedes cultivar sandías con éxito si empiezas a sembrar en el interior o compras plantas jóvenes en un vivero (ten en cuenta que éstas serán muy tiernas), y si cultivas variedades de temporada más corta. Dependiendo de la variedad de sandía que plantes, pueden pasar entre 70 y 100 días desde la plantación hasta la cosecha.
Exposición al sol
Las sandías prosperan con la mayor cantidad de sol posible. Plante las sandías en un lugar que reciba de 8 a 10 horas de luz solar directa al día, evitando las zonas donde los árboles o la casa puedan dar sombra a las plantas, ya que esto puede frenar su crecimiento. Consejo profesional: Cultivar sandías en bancales elevados favorece un buen drenaje y mantiene el calor del sol durante más tiempo. Sólo tienes que asegurarte de que tienes mucho espacio.
Tipo de suelo
Las sandías se alimentan mucho y tardan todo el verano en madurar. Por estas razones, es muy importante prestar atención a los detalles del suelo donde planeas plantar la sandía. Empieza por realizar un análisis del suelo, que te indicará el nivel de pH de la tierra y señalará las deficiencias de nutrientes. El suelo ideal para cultivar sandías requiere un pH entre 6,0 y 7,5 y una consistencia franca, ligeramente arenosa y con buen drenaje.
Para manipular el suelo en las condiciones adecuadas para la plantación de sandías, mezcla compost de alto contenido en nitrógeno en las camas justo antes de plantar. (En el compost casero, la hierba, los restos de plantas, los posos de café y las frutas y verduras se consideran materiales ricos en nitrógeno. Si utilizas una mezcla de compost comprada en una tienda, asegúrate de que el porcentaje de contenido de nitrógeno es mayor que los porcentajes de fósforo y potasio). El uso de compost para enmendar el suelo de tu lecho de sandías también ayudará a mejorar la estructura del suelo y la retención de agua.
Espaciado de las plantas
Las sandías son una de las frutas más grandes para cultivar y cosechar, por lo que requieren una gran cantidad de espacio. Cada planta debe tener una superficie de hasta 6 metros cuadrados para permitir que sus vides se extiendan ampliamente. No plantes la fruta cerca de otros cultivos para evitar la posibilidad de que se amontonen.
Plantas acompañantes
Como ya hemos dicho: Las sandías son grandes y ocupan mucho espacio de cultivo, por lo que es mejor cultivarlas solas en sus arriates. Las sandías también exudan sustancias químicas alelopáticas que dificultan la germinación de las semillas y el crecimiento de las plántulas, lo que puede matar a las plantas vecinas de bajo crecimiento. Si realmente quieres plantas de compañía para tu sandía, cultiva la fruta junto a plantas establecidas que crezcan hacia arriba, como los tomates y el maíz. Las enredaderas de sandía también cubrirán el lecho del jardín y servirán como mantillo vivo que inhibirá las malas hierbas.
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Cómo plantar sandías
Después de preparar tu huerto de sandías y asegurarte de que la tierra está suficientemente caliente, es hora de plantar. Empieza a comprar semillas en invierno para asegurarte la variedad de sandía que quieres, o ve al vivero a principios de la primavera para conseguir plantas jóvenes que puedas trasplantar a tus parterres. A continuación te explicamos cómo plantar sandías tanto de semillas como de trasplantes.
Cómo plantar sandías a partir de semillas
Herramientas y materiales necesarios
- Pala pequeña
- Semillas de sandía
- Fertilizante o abono
- Herramienta de medición
- Cubierta flotante para hileras
- Varilla de riego o una regadera
- Tijeras
Paso 1: Añadir el fertilizante
Antes de empezar a cavar y plantar, mezcla 4 pulgadas de fertilizante o 6 pulgadas de compost bien envejecido en la capa superior de la tierra del lecho del jardín.
Paso 2: Construye parches de sandía
Plantar sandías en montículos ayuda a las plantas a conseguir el máximo drenaje del suelo y la máxima exposición al sol. Amontona montículos de tierra de unos 30 cm de ancho y unos pocos centímetros de alto. Separa cada montículo de 3 a 5 pies para que las vides de sandía tengan mucho espacio para extenderse.
Paso 3: Siembra las semillas
Presiona tres o cuatro semillas en la superficie de la tierra en la parte superior del montículo, a una profundidad de entre ¾ y 1 pulgada. Cubre las semillas con tierra y dale unos golpecitos suaves.
Paso 4: Riega las semillas y observa cómo crecen
Riega suavemente las semillas con una varilla de riego o una regadera. Una vez que las plántulas hayan alcanzado unos pocos centímetros de altura, aclara la planta, eligiendo los brotes más bonitos y cortando los demás con unas tijeras. Deberías tener dos plántulas por montículo.
Cómo plantar sandías a partir de trasplantes
Si vives en un clima con una estación de crecimiento más corta que el número de días necesarios para cultivar tu variedad de sandía, empieza a plantar semillas en el interior. Las semillas germinarán y brotarán en trasplantes, que luego plantarás en tu lecho de jardín.
Herramientas y materiales necesarios
- Macetas biodegradables de tres pulgadas
- Mezcla para empezar a sembrar
- Semillas de sandía
- Botella de spray
- Tijeras
Paso 1: Llenar las macetas con la mezcla de inicio
Llenar cada maceta biodegradable con la mezcla de inicio de semillas hasta aproximadamente un centímetro por debajo del borde.
Paso 2: Añadir las semillas
Coloca tres semillas en cada maceta, luego cubre con ½ pulgada más de mezcla para macetas. Riegue suavemente.
Paso 3: Colocar las bandejas de semillas cerca de la ventana
Coloca las bandejas junto a una ventana que reciba mucha luz solar. Riegue diariamente con una botella de spray.
Paso 4: Adelgace las hojas
Una vez que las hojas de las plántulas tengan unos 5 cm de altura, acláralas eligiendo la plántula más bonita de cada maceta y recortando las demás.
Paso 5: Endurecer las plántulas
Aproximadamente una semana después de la última helada, y cuando el aire exterior haya alcanzado los 70 grados, endurezca los plantones colocándolos en el exterior durante una hora cada día.
Paso 6: Preparar el huerto de sandías
Prepara el huerto de sandías una vez que la tierra haya alcanzado los 70 grados, siguiendo los consejos que hemos dado anteriormente. Cava montículos con agujeros de plantación lo suficientemente grandes como para colocar dos macetas en cada uno.
Paso 7: Plantar los plantones
Coloca dos plántulas en cada agujero y recorta los bordes superiores de cada maceta biodegradable hasta que estén a la altura del nivel de la tierra en el exterior. Rellena los agujeros con tierra y riega suavemente. Sigue regando todos los días hasta que las plantas estén bien establecidas.
Cómo cultivar y cuidar la sandía
Desde el riego hasta la elección de los fertilizantes, y hasta el momento de cosechar la sandía, esto es lo que necesitas saber sobre el crecimiento y el cuidado adecuados de esta dulce delicia de verano.
Riego
Como se ha mencionado anteriormente -y como el nombre de la fruta sugiere- las sandías requieren un riego abundante. Es importante regar sólo la zona de las raíces, es decir, el área inmediata de la tierra y el oxígeno que rodea a las raíces, para evitar eliminar los nutrientes del suelo y desperdiciar agua. Aplique sólo la cantidad de agua que pueda soportar la zona de las raíces (los 30 cm superiores). El suelo debe estar muy húmedo, pero el agua no debe acumularse en la parte superior. Esto puede significar riegos frecuentes y de corta duración a lo largo del día.
Consejo profesional: Instale un sistema de riego por goteo con un temporizador para no tener que intervenir en el riego. De este modo, el agua evitará el follaje y sólo se aplicará a la zona de las raíces.
Fertilización
Después de que tus plantas de sandía comiencen a florecer, utiliza un fertilizante con menos nitrógeno para fomentar la fruta, como un fertilizante a base de algas (¡que también está demostrado que ayuda a que las frutas cosechadas tengan una vida útil más larga!) Esparce el abono a unos 5 ó 6 centímetros a los lados de cada hilera de plantas. Aplícalo una vez más justo después de que la fruta haya emergido.
Control de plagas y enfermedades
Los pulgones y los escarabajos del pepino son los mayores enemigos que pueden afectar a la salud de tus plantas de sandía. Estas plagas se alimentan de la fruta y pueden transmitir virus de planta a planta.
Para evitar que los pulgones del melón y del algodón ataquen las plantas de sandía, planta plantas aromáticas como las siguientes en un parterre vecino:
- Ajo
- Hierba gatera
- Eneldo
- Menta
- Capuchinas
Evite que el escarabajo manchado del pepino y el escarabajo rayado del pepino se alimenten de sus melones plantando cultivos vecinos como:
- Maíz
- Brócoli
- Rábanos
- Capuchinas
- Caléndulas
- Tansies
Foto vía Walter Reeves
Cómo cosechar la sandía
Dado que las sandías dejan de madurar una vez recogidas, es imprescindible conocer el momento adecuado para la cosecha. A continuación, te explicamos cómo saber cuándo están maduras las sandías, cómo cosecharlas y algunos consejos para conservarlas durante mucho tiempo.
Comprueba la madurez
Una vez que la sandía parece lo suficientemente grande como para disfrutarla, es posible que estés ansioso por recogerla. Ahora es el momento de comprobar la madurez de las sandías. Si la fruta se ha separado de la cepa, o si la cepa está muerta, es el momento de recogerla, ya que la fruta no madurará más una vez fuera de la cepa. Si la sandía aún está unida, inspeccione el zarcillo rizado más cercano al tallo. El melón está maduro si el zarcillo está seco y marrón. También notarás que la piel del melón ha pasado de ser brillante a opaca, mientras que la parte inferior ha pasado de ser verde claro mientras maduraba a ser amarilla cuando está completamente madura.
Instrucciones para la cosecha
Utiliza un cuchillo afilado para cortar la fruta de la vid. Asegúrate de dejar un trozo de 5 cm de largo del tallo unido a la fruta.
Almacenamiento
Puedes almacenar una sandía sin cortar durante unos 10 días. Una vez cortada, envuélvela bien en plástico. La fruta durará en el frigorífico unos cuatro días.
¿Has cultivado sandías en tu jardín? Si es así, danos tus mejores consejos y trucos a continuación.
Este proyecto fue traducido del inglés