De caja vieja a bandeja rústica de otoño

A veces las cosas viejas más caseras pueden transformarse, como Cenicienta, en algo atractivo, por no decir funcional.
Encontré una caja vieja y mugrienta, abandonada bajo una mesa de exposición en una venta de garaje y vi su potencial.
¿Te habrías fijado en este trasto viejo? Me gustó su altura y su longitud y pensé que se podría embellecer y utilizar como centro de mesa otoñal.
También me gustan las pequeñas asas laterales que facilitarían el levantamiento y el traslado.
Obtén los detalles y los consejos de estarcido en la publicación original del blog que aparece a continuación. Y no te olvides de echar un segundo vistazo a las ventas de garaje y a las tiendas de segunda mano para encontrar esas piezas de "hermanastra fea" que otros dejan atrás.

Este proyecto fue traducido del inglés