Los cuatro secretos de la sal

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por BrightNest
Es perfecta para el borde de tu margarita y añade una pizca de sabor a tu filete, pero ¿sabías que la sal también puede limpiar tu horno y mantener las flores frescas? Conozca más sobre este ingenioso y económico producto básico de la cocina:
Limpie su horno.


Puede que tu suflé tenga un aspecto magnífico, pero un poco se ha manchado en el fondo del horno mientras se horneaba. Para limpiar las manchas del horno, todo lo que necesitas es sal de mesa, agua y una toalla de papel. Deje que su horno se enfríe por completo y, a continuación, espolvoree una generosa cantidad de sal de mesa sobre la mancha. Espera unos 10 minutos y luego limpia la sal con una toalla de papel húmeda. Se quitará enseguida. Para más consejos relacionados con el horno, lee: No atiborres el horno y otros consejos profesionales para hornear.


Mantén las flores frescas.


Mantén tus margaritas frescas y tus girasoles amarillos añadiendo una pizca de sal al agua del jarrón. Esto funciona porque la sal es "alimento" para las flores e inhibe el crecimiento bacteriano. Asegúrate también de cortar los tallos en ángulo para que no se apoyen en el fondo del jarrón. Esto permite una mejor transferencia de agua hacia arriba de los tallos. Vuelve a cortar los tallos cada día cuando cambies el agua para mantener los extremos abiertos. Consejo: Una aspirina o una pizca de azúcar tendrán el mismo efecto.


Matar la hiedra venenosa.


Si alguna vez has sufrido un sarpullido rojo y con picor después de un paseo por el bosque, entonces conoces bien esta molestia de tres hojas. En Estados Unidos, la hiedra venenosa crece al este de las Rocosas y normalmente se encuentra en zonas boscosas. Para matar la hiedra venenosa en su jardín, mezcle un kilo de sal con un galón de agua jabonosa (utilice un jabón suave para lavar platos). Llene una botella de agua de plástico con la mezcla y aplíquela sobre las hojas y los tallos de la hiedra venenosa. Nota: ¡Evita rociar cualquier planta que no quieras matar!


Prevenir los frutos marrones.


Puede que hayas oído que un chorro de zumo de limón evitará que la fruta pelada, como las manzanas y las peras, se oscurezca, pero ¿sabías que el agua ligeramente salada también sirve? Sólo tienes que llenar un bol con agua a temperatura ambiente y añadir una cucharada de sal. Cuando hayas cortado la fruta, déjala en la mezcla de agua durante varios minutos. Aclara el agua salada y sirve la fruta con mantequilla de cacahuete, o prueba estos nachos de manzana fáciles de hacer.


Para ver el artículo completo con enlaces en el texto y otros consejos caseros, visite: http://bit.ly/1CPKVC5

Este proyecto fue traducido del inglés